LA SORPRESA
Lengua marina llegando a mis playas,
horadando la piedra en busca de cuevas profundas
que encierran el misterio y el fuego de mi alma.
Manos llenas de viento que me empujan,
me arrastran al desierto poblado
de gaviotas, de
soles y lunas en pugna.
Boca despojada de egoísmo,
sobre mi boca ansiosa de mares nuevos
de nuevas riveras, de nuevos abismos.
Y tu voz,
rumor de brisas matutinas,
susurrando un poema, inevitable y fugaz,
como lamento de saxos y sordinas...
La sorpresa nos atrapó.
Buscábamos lo mismo...
Vos a mí, y
yo a vos.
Del Libro: "Con aroma a jazmín", febrero de 2002
Muy lindo el poema
ResponderEliminar